Onagra

Nombre Científico: Oenothera biennis
Familia: Enoterácea
Origen: Norteamérica



El aceite de onagra es muy rico en ácidos grasos poliinsaturados, los cuales intervienen en la regulación de los sistemas biológicos de nuestro organismo.


Contiene un 70% de ácido linoleico y un 10% de ácido gamma-linolénico, estos ácidos grasos se denominan esenciales porque nuestro organismo no es capaz de producirlos por sí mismo, por lo que debemos introducirlo cada día en la alimentación.

El garantizar el aporte necesario en nuestra dieta de ácido linoleico y gamma-linolénico resulta de gran importancia para que nuestro organismo disponga de las prostaglandinas necesarias para regular diversos procesos metabólicos en los que interviene, como dilatación de los vasos sanguíneos, reducción de la presión arterial, inhibición de la agregación plaquetaria (trombosis), de la síntesis del colesterol, de la inflamación artrítica, equilibrio del sistema hormonal, desarrollo del sistema nervioso.

Por todo ello, la lista de enfermedades en las que se ha aplicado con éxito el aceite de onagra son numerosas:

• Colesterol en la sangre: y en general en todas la hiperlipemias (aumento del contenido graso en la sangre)

• Trastornos genitales femeninos: dismenorrea, síndrome premenstrual, ciclos irregulares, esterilidad por insuficiencia ovárica

• Problemas dermatológicos: acné, arrugas o sequedad en la piel, fragilidad de las uñas y el cabello.

• Trastornos de la respuesta inmunitaria: alergias, asma, eccemas, dermatitis atópica

• Reumatismo: artritis reumatoide y procesos reumáticos en general.

• Trastornos circulatorios: hipertensión arterial y tendencia a trombosis por aumento de la agregación plaquetaria. También como preventivo de los accidentes vasculares cerebrales (trombosis y hemorragia cerebral) y del infarto de miocardio, pues dilata las arterias e impide la formación de coágulos

• Trastornos de la conducta: estres, nerviosismo, neurastenia.